Cuando los mundos Chocan

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Él, sentado en el bar, sin nada más en su campo visual que un dorado vaso de whisky in the rocks y las manos de barman secando unas copas, hacia ya un tiempo esto se había convertido en su forma de relajarse luego de un largo día de tedio. No solia asistir a sitios como aquellos, los consideraba vulgares, denigrantes para las feminas que se pavoneaban en vistas de su poca vestimenta frente a los ojos del los viejos verdes y por eso llevaba más de cuatro meses luchando para que cerraran aquel recinto.
-Al fin...-Masculló por lo bajo mientras una sonrisa zocorrona se formaba en sus labios.

-¿Cómo dijo señor?

-Nada, no se preocupe...-Luego de decir esto puso la paga en la barra y se levanto victorioso, dispuesto a escupir el piso del local, pero eso seria grosero.

Listo para la partida, se dirigio a la puerta, justo cuando una figura curvilinea se paso por su lado, cambiando por completo su vision de los sucesos, lo siguiente que supo fueque estaba como idiota mirando algun punto de su parte baja y que ella le golpeo tan fuerte como pudo.

Llegaria tarde a recojer a su hermana, sabia que no debia, pero si su madre se enteraba de que ella era la que aportaba todo ese dinero a la familia mientras se vendia a medias por las tardes las mataria a ambas y por más que sonara egoista decirlo: No queria morir. Cruzó las puertas del local y avisto a su hermana en la parte de atras, hablando con un(a) compañero(a), mientras se arreglaba los rellenos del sosten, sin pensarlo dos veces paso rapido y golpeo sin querer a un fino caballero, que para ella era un hijo de puta igual que no dudo en mirar sus pechos antes que sus ojos.
Merecía un golpe.

Ahora se sentia compretamente culpable de lo que había hecho, nada de eso era necesario (bueno quizas si el golpe, para que mentir), y lo peor de todo es que todos estaban rodeando al sujeto con voces escandalisadas mientras su hermana le pegaba en la espalda con rabia.
-ESTUPIDA LO ARRUINASTE!-Decia-ME VAN A ECHAR Y TODO ES TU CULPA!

-Tranquila, esta bien, no le paso nada fue solo una bofetada fuerte...

-Señor, perdoneme, ¿Qué puedo hacer para que se sienta mejor?

-Nada, amor, nada

E L L A